lunes, 23 de abril de 2012

"El arte de Amar" de Erich Fromn






El libro “El arte de amar”, ha sido una obra literaria muy famosa de Erich Fromm, en el cual nos narra las concepciones que este autor hace sobre el amor, la forma de vivirlo, llevarlo a la práctica y el enriquecimiento que le podemos dar con nuestro trabajo diario.

         Lo más importante para este escritor es que el amor es algo muy sublime, no es fácil de tenerlo, pero que se puede llegar a alcanzar, todo depende de la persona que lo quiera tomar y llevar en su vida.

         Erich Fromm nos comenta que la gente piensa en encontrar una persona que los ame, que los acepte tal y como son, no importando sus defectos; pero aquello es totalmente incorrecto, no hay reciprocidad; nos dice que debemos preocuparnos no tanto en ser amados sino por amar, dar y ser feliz al otro, sin pretender recibir algo a cambio; el amor no es una mercancía.

         El amor es un arte, por lo tanto algo que se adquiere, y nos ayuda a crecer en todos los aspectos de nuestra persona; como sentirnos bien con nosotros mismos, una motivación o ilusión para lograr todos nuestros proyectos, o simplemente aprender cosas y valorar lo que tenemos.

         Erich Fromm hace varias clasificaciones del amor, como: amor maternal; paternal; al prójimo; amor erótico; por sí mismo y a Dios. Cada tipo de amor tiene sus propias características, pero todos nos llevan a un solo camino que es la FELICIDAD y a la entrega total.

         El amor maternal es muy especial, es aquel tipo de cariño y sentimiento que la madre le otorga a su pequeño bebé que lleva por dentro; el cual forma parte de su cuerpo, de su ser. El amor de una madre es incondicional, no hay más grande amor que ese, es tan puro y sublime, que sólo nuestras madres han tenido la capacidad de sentir ese amor, y las realiza como seres humanos.

         Nuestra madre siempre nos va a querer, no importa si somos los peores hijos del mundo, si le fallamos o la hacemos sentir menos; ella siempre estará a nuestro lado, apoyándonos en las buenas y en las malas, brindándonos un tierno beso y abrazo cuando nos sentimos solos e incomprendidos.

         Es muy injusto que muchas personas no valoren el amor de una madre, lo toman como si fuera algo sin importancia; no aprecian los sacrificios de la persona que los trajo al mundo, sus desvelos, su sufrimiento.

         Deberíamos valorar más este amor, muchas personas y niños abandonados desearían tener una madre que los protegiera, que les brindara amor y les dijera: ¡HIJO, TE QUIERO!

         Es un hecho que no todo es miel sobre hojuelas, hay madres que maltratan a sus hijos, no los quieren  no desearon que vinieran a este mundo, pero en estos casos hay que perseverar y alcanzar una paz; todo depende de la entrega que tengamos cada persona y lo que queremos llegar a ser, ¡tú eres el arquitecto de tu propio destino!

         La familia es muy importante, porque a través de ella aprendemos las bases que nos ayudarán a defendernos en la vida; la forma de actuar y responder ante una determinada problemática. Es aquí donde interviene el amor de un padre.

         El amor paternal es también muy especial, tal vez no tenga la misma intensidad del amor maternal, pero es muy importante para el desarrollo de todos los miembros de la familia.

         Un padre es aquel que te apoya, te enseña la manera de resolver los problemas, te ayuda a ser valiente y siembre en sus hijos el valor de la perseverancia y fortaleza. No lo podemos subestimar, sino llevarlo en nuestra vida.

         Un padre es como la parte racional, el cerebro, el control de las cosas; mientras que una madre es el corazón, los sentimientos.

         El amor al prójimo se puede ver reflejado en la SOLIDARIDAD, cuando nosotros ayudamos a nuestros hermanos, dando lo mejor de nosotros, sin tratar de recibir algo a cambio.

         El ejercicio de la SOLIDARIDAD nos ayuda a crecer como seres humanos, tiene un gran valor que no puede hacerse menos. Es muy cierto la frase que dice: “La unión hace la fuerza”, el trabajo en equipo nos ayuda a hacer grandes cosas y con mucha calidad.

         Pero hay muchas formas de ayudar a nuestros hermanos, pueden ser ayudas económicas (comida, vestido, casa, dinero, etc.)  y apoyo moral. ¡Qué hermosa es la ayuda moral!, tiene un valor único que no se puede pagar ni con el diamante más grande y fino del mundo.

         Apoyar a un niño que se golpeó; decir palabras de aliento a un amigo de nosotros que perdió lo que más valoraba; acompañar a nuestros semejantes en sus momentos más difíciles y gratos; habla de un amor al prójimo que no puede ser retribuido sino sólo ser valorado y nos ayuda a reafirmar nuestros lazos de amistad y amor.

         Erich Fromm también nos habla de otro tipo de amor, que es el amor erótico, y es a su vez uno de los más polémicos y raros que puedan existir. Aquí entran las subjetividades de cada persona y sus propias experiencias.

         Cada persona tiene sus propios gustos, ideales y proyectos, cada quien ve las cosas de diferente manera, pero, qué es amar a una persona y por qué encontrarla.

         Fromm nos dice que amar es un arte y que las personas sólo nos preocupamos en ser amados y no en amar, debemos dar amor y ser nosotros felices porque hacemos feliz al otro.

Es importante amar al otro por el simple hecho de sentirse apoyado, comprendido, compartir con alguien tu vida, tus esperanzas, proyectos, dar lo mejor de ti y aprender.

Cada persona busca un ser en especial; tal vez que sea atractivo, buena persona, inteligenEl libro “El arte de amar”, ha sido una obra literaria muy famosa de Erich Fromm, en el cual nos narra las concepciones que este autor hace sobre el amor, la forma de vivirlo, llevarlo a la práctica y el enriquecimiento que le podemos dar con nuestro trabajo diario.

         Lo más importante para este escritor es que el amor es algo muy sublime, no es fácil de tenerlo, pero que se puede llegar a alcanzar, todo depende de la persona que lo quiera tomar y llevar en su vida.

         Erich Fromm nos comenta que la gente piensa en encontrar una persona que los ame, que los acepte tal y como son, no importando sus defectos; pero aquello es totalmente incorrecto, no hay reciprocidad; nos dice que debemos preocuparnos no tanto en ser amados sino por amar, dar y ser feliz al otro, sin pretender recibir algo a cambio; el amor no es una mercancía.

         El amor es un arte, por lo tanto algo que se adquiere, y nos ayuda a crecer en todos los aspectos de nuestra persona; como sentirnos bien con nosotros mismos, una motivación o ilusión para lograr todos nuestros proyectos, o simplemente aprender cosas y valorar lo que tenemos.

         Erich Fromm hace varias clasificaciones del amor, como: amor maternal; paternal; al prójimo; amor erótico; por sí mismo y a Dios. Cada tipo de amor tiene sus propias características, pero todos nos llevan a un solo camino que es la FELICIDAD y a la entrega total.

         El amor maternal es muy especial, es aquel tipo de cariño y sentimiento que la madre le otorga a su pequeño bebé que lleva por dentro; el cual forma parte de su cuerpo, de su ser. El amor de una madre es incondicional, no hay más grande amor que ese, es tan puro y sublime, que sólo nuestras madres han tenido la capacidad de sentir ese amor, y las realiza como seres humanos.

         Nuestra madre siempre nos va a querer, no importa si somos los peores hijos del mundo, si le fallamos o la hacemos sentir menos; ella siempre estará a nuestro lado, apoyándonos en las buenas y en las malas, brindándonos un tierno beso y abrazo cuando nos sentimos solos e incomprendidos.

         Es muy injusto que muchas personas no valoren el amor de una madre, lo toman como si fuera algo sin importancia; no aprecian los sacrificios de la persona que los trajo al mundo, sus desvelos, su sufrimiento.

         Deberíamos valorar más este amor, muchas personas y niños abandonados desearían tener una madre que los protegiera, que les brindara amor y les dijera: ¡HIJO, TE QUIERO!

         Es un hecho que no todo es miel sobre hojuelas, hay madres que maltratan a sus hijos, no los quieren  no desearon que vinieran a este mundo, pero en estos casos hay que perseverar y alcanzar una paz; todo depende de la entrega que tengamos cada persona y lo que queremos llegar a ser, ¡tú eres el arquitecto de tu propio destino!

         La familia es muy importante, porque a través de ella aprendemos las bases que nos ayudarán a defendernos en la vida; la forma de actuar y responder ante una determinada problemática. Es aquí donde interviene el amor de un padre.

         El amor paternal es también muy especial, tal vez no tenga la misma intensidad del amor maternal, pero es muy importante para el desarrollo de todos los miembros de la familia.

         Un padre es aquel que te apoya, te enseña la manera de resolver los problemas, te ayuda a ser valiente y siembre en sus hijos el valor de la perseverancia y fortaleza. No lo podemos subestimar, sino llevarlo en nuestra vida.

         Un padre es como la parte racional, el cerebro, el control de las cosas; mientras que una madre es el corazón, los sentimientos.

         El amor al prójimo se puede ver reflejado en la SOLIDARIDAD, cuando nosotros ayudamos a nuestros hermanos, dando lo mejor de nosotros, sin tratar de recibir algo a cambio.

         El ejercicio de la SOLIDARIDAD nos ayuda a crecer como seres humanos, tiene un gran valor que no puede hacerse menos. Es muy cierto la frase que dice: “La unión hace la fuerza”, el trabajo en equipo nos ayuda a hacer grandes cosas y con mucha calidad.

         Pero hay muchas formas de ayudar a nuestros hermanos, pueden ser ayudas económicas (comida, vestido, casa, dinero, etc.)  y apoyo moral. ¡Qué hermosa es la ayuda moral!, tiene un valor único que no se puede pagar ni con el diamante más grande y fino del mundo.

         Apoyar a un niño que se golpeó; decir palabras de aliento a un amigo de nosotros que perdió lo que más valoraba; acompañar a nuestros semejantes en sus momentos más difíciles y gratos; habla de un amor al prójimo que no puede ser retribuido sino sólo ser valorado y nos ayuda a reafirmar nuestros lazos de amistad y amor.

         Erich Fromm también nos habla de otro tipo de amor, que es el amor erótico, y es a su vez uno de los más polémicos y raros que puedan existir. Aquí entran las subjetividades de cada persona y sus propias experiencias.

         Cada persona tiene sus propios gustos, ideales y proyectos, cada quien ve las cosas de diferente manera, pero, qué es amar a una persona y por qué encontrarla.

         Fromm nos dice que amar es un arte y que las personas sólo nos preocupamos en ser amados y no en amar, debemos dar amor y ser nosotros felices porque hacemos feliz al otro.

Es importante amar al otro por el simple hecho de sentirse apoyado, comprendido, compartir con alguien tu vida, tus esperanzas, proyectos, dar lo mejor de ti y aprender.

Cada persona busca un ser en especial; tal vez que sea atractivo, buena persona, inteligente, con o sin dinero; eso depende de cada quien.

Fromm tiene mucha razón al decir que el tener sexo sin amor te hace un vacío más grande en tu corazón. El sexo para que te ayude a crecer como ser humano y te haga sentir pleno, tiene que ser con una persona que quieras mucho y que también te ame a ti.

También nos habla del amor homosexual, nos dice que éste es una desviación de una relación heterosexual. Fromm vivió en una época donde se tachaba de enfermedad a la homosexualidad.

Actualmente, en este mundo contemporáneo, siguen habiendo algunos malos perjuicios sobre los homosexuales, pero cada día hay más aceptación a diferentes formas de expresar el amor hacia una persona. Los homosexuales tienen los mismos derechos que los heterosexuales, no es justo que sólo se les rebaje a la cuestión sexual, también tienen la capacidad para formar una relación estable, para complementarse, todos los seres humanos tienen derecho a escoger su propio estilo de vida.

Para finalizar, debemos amarnos a nosotros mismos para dar amor. El amor a Dios es algo muy difícil de tratar, sólo lo sentimos y forma parte importante de nuestras vidas.
 te, con o sin dinero; eso depende de cada quien.

Fromm tiene mucha razón al decir que el tener sexo sin amor te hace un vacío más grande en tu corazón. El sexo para que te ayude a crecer como ser humano y te haga sentir pleno, tiene que ser con una persona que quieras mucho y que también te ame a ti.

También nos habla del amor homosexual, nos dice que éste es una desviación de una relación heterosexual. Fromm vivió en una época donde se tachaba de enfermedad a la homosexualidad.

Actualmente, en este mundo contemporáneo, siguen habiendo algunos malos perjuicios sobre los homosexuales, pero cada día hay más aceptación a diferentes formas de expresar el amor hacia una persona. Los homosexuales tienen los mismos derechos que los heterosexuales, no es justo que sólo se les rebaje a la cuestión sexual, también tienen la capacidad para formar una relación estable, para complementarse, todos los seres humanos tienen derecho a escoger su propio estilo de vida.

Para finalizar, debemos amarnos a nosotros mismos para dar amor. El amor a Dios es algo muy difícil de tratar, sólo lo sentimos y forma parte importante de nuestras vidas.



No hay comentarios:

Publicar un comentario